Por fin puedo sentarme a escribir, a pesar del día que es, pero es lo que tiene cocinar la víspera: que el mismo día de Nochebuena se encuentra un hueco. Ha sido una semana de vértigo. El 17, como anuncié, presenté Yo que tanto te quiero. Era una presentación diferente, por muchas razones: cambiaba de escenario, mi implicación en la publicación de este libro ha sido mucho mayor, por primera vez en tantos años contaba con el apoyo del editor en el acto, que se desplazó desde Madrid para acompañarme...

Esta nueva entrada se ha demorado porque quería poder dar noticias, información concreta, sobre algo muy importante para mí, y por fin puedo hacerlo: El 17 de diciembre presento Yo que tanto te quiero, el final de mi trilogía y desde ya puede comprarse en edición de papel en Amazon, Create Space o en mi web aunque a las librerías no llegará hasta la fecha de la presentación.Lucía, una niña de once años, comienza a narrar la historia de su familia tras compartir la última guerra de Elena Lamarc,...

Sé que hace mucho que no escribo en el blog, la vida se me lleva por delante por más buenas intenciones que tenga y propósitos me haga para frenar y embarcarme en el movimiento slow. Pero mañana es 23 de abril, sant Jordi, el día del libro y el aniversario de mi presentación pública ante la prensa como escritora y eso me ha empujado a salir de mi madriguera y volver al blog. Eso, y la iniciativa en la que he participado y cuento algo más abajo. Desde entonces han pasado...

He tardado casi dos semanas en aterrizar de la vorágine que se inició con la salida de «Las guerras de Elena» y que alcanzó su punto álgido con las presentaciones. Todo ha pasado muy rápido, demasiado, pero por fortuna han quedado reportajes grabados para poder saborearlo con calma y tomar conciencia de lo sucedido. Pero empezaré por el principio. No hace mucho, poco después de mi presentación, leía en el blog de mi compañera María José Moreno ―Lugar de encuentro― los nervios pasados pensando si llenaría o no el local en...

Por fin llegó. Han sido cinco años de ver volar a mi ave Fénix en solitario por las librerías, aunque Las guerras de Elena estuviera en versión digital desde hace tiempo. Por mucho que se diga, la sensación de ver tu obra en papel, de poderla tocar, de encontrarla en las mesas de novedades o en las estanterías de los olvidados, da igual, no es comparable. Estoy ilusionada, lo reconozco. Por fin sale publicada en una preciosa edición de papel, a partir del 22 de enero (y ya en preventa), mi...

A lo tonto, a lo tonto, ya han pasado 10 días de septiembre y no ha habido forma de ponerme a escribir. La verdad, me ha faltado concentración, ánimo y ganas, tres cosas fundamentales. Lo que me nacía escribir no podía publicarlo y lo que debía escribir para el blog no me salía por esa apatía posveraniego. Pero aquí estoy, reanudando el camino, con un otoño en puertas que amenaza ser intenso y muchos cambios importantes en lo personal y en lo literario que van a marcar el futuro. Espero...

Cada vez que termino de escribir un libro me quedo con una sensación de vacío incómoda, de amputación. El final de una novela es un momento de tensión, conforme te acercas y ves cerrarse la historia sientes ―o al menos yo lo siento― el peso de la responsabilidad, la emoción de haber llegado a la meta, la incertidumbre de si habrás escrito algo que merezca la pena ser leído, de si ese final es lo bastante bueno… cosas todas ellas latentes durante el proceso pero cuyo peso aumenta conforme se...

Parte 3. 15 de Junio. La entrevista. La noche del 14 al 15 de junio apenas pegué ojo, y eso que me reñía forzándome a dormir, pero la adrenalina ―y un par de vecinos gritones― me lo impidió; demasiadas emociones. No era buena forma de ir a una entrevista, pero la ilusión puede con todo y me levanté sin problemas y más despejada de lo previsible. Calculé con meticulosidad alemana la ruta de metro que tenía que seguir para llegar a ES Radio y el tiempo que me llevaría, y subiendo las...

Para un autor novel, presentar o firmar en Madrid viene a ser como para un torero debutar en las Ventas. Una emoción parecida sentí yo el viernes cuando subí en el AVE para dirigirme a la capital. Lo había intentado en alguna ocasión y se suponía que entre noviembre de 2012 y febrero de 2013 se iba a hacer algo allí, pero la realidad fue que por causas ajenas a mi voluntad y de forma inesperada me quedé en tierra, y pasado el tiempo me convencí, me convencieron, de que...

Quienes me conocen saben que me encanta el cine de los 40 y 50, las películas en blanco y negro de Mankievick, Vidor y Cukor, las primeras en color de Elia Kazan, casi todas las de Ford, las comedias de Wilder… Crecí con ellas, y tal vez por eso me han calado. Cuando me preguntan en entrevistas cuales son mis antecedentes literarios, quienes han influido en mi estilo, me cuesta reconocer autores o corrientes concretos. Sin embargo soy consciente de la huella que ese tipo de cine ha dejado en...