Qué año más difícil para hacer balance, ha sido intensamente bueno e intensamente malo. Supongo que eso deja el año en tablas, pero lo potente de algunos sentimientos tal vez haya desnivelado la balanza hacia lo no tan bueno. Ha sido un año de hitos, de puntos de inflexión, de cambios radicales. En lo literario el año comenzó bien. Mi segunda novela veía la luz el 22 de enero con una presentación en el Ateneo Mercantil que dejaba un regusto dulce, a recompensa, a trabajo bien hecho. Me acompañaban casi todas...

Este pobre rincón de reflexiones y tonterías varias lleva unos meses al ralentí ―iba a decir que como como su autora, pero la autora lo que va es demasiado acelerada a pesar de sus buenas intenciones― pero en estas fechas no quería dejar de escribir lo que siento y recordar a los que tantas veces han pasado por aquí. La verdad es que verme en la obligación de cerrar los comentarios, por culpa del ataque continuo de spam que sufro, me desmotivó bastante. Un blog sin comentarios es como hablar ante...

No es un tópico. Al menos en mi caso y en muchos otros que conozco. Es una actividad bastante incomprendida incluso, o fundamentalmente, por aquellos que más cerca tienes. Cuando empiezas a dedicarle tiempo a la escritura no lo notas. La familia lo ve como algo original, como un pasatiempo un tanto friqui pero que mola, sobre todo si escribes para publicar, y lo consienten durante unos meses. Luego la percepción va cambiando. Tu actividad se convierte en esa manía, esa rareza inútil ―porque ya van viendo que esto, salvo un...

Casi todos los días bajo a caminar por el cauce del río. Nueve kilómetros de árboles, flores, y gente variopinta. Y desde hace meses, cada vez que bajaba, veía al mismo hombre. Un tipo de aspecto descuidado pero limpio, tranquilo, con pelo y barba largas tirando a trigueño. Durante meses he pasado a su lado preguntándome quién sería. Qué le habría pasado para llegar a ver pasar la vida sentado en una roca del cauce, inmóvil, sin apenas hablar con nadie. Un día lo vi haciendo algo parecido al ejercicio,...

Sé que son vacaciones, que la gente necesita desconectar y disfrutar de la paz estival, pero por desgracia el mundo nunca descansa y las guerras mucho menos. Y además hacen ruido en los medios y llenan espacios que la política nacional deja vacante por el éxodo de agosto, y es difícil no asistir a lo que está pasando con la mala conciencia de verse en biquini dedicado a sestear mientras se masacra a gente en algún lugar lejano. Asistimos con dolor a los bombardeos en la franja de Gaza, al...

Sí, yo también decía eso de «me lo compraré para vacaciones» pensando en esos libros que quería leer sin interrupciones y que durante el curso laboral y escolar se hacía imposible. Y la realidad era que me olvidaba del título y, pasados los meses, había salido otro igualmente apetecible que me entraba por los ojos desde la mesa de novedades. Es más, del título aquel que me conquistó a primeros de año no quedaba ni rastro en las librerías y en mi memoria tan solo permanecía un pequeño rumor.Entonces no...

Hace meses que no escribo y me siento en deuda con este espacio y la gente que amablemente me sigue. Está siendo un año difícil, con muchos frentes abiertos, demasiados, aunque estoy mejor que nunca. Menos mal, porque si fuera de otra forma no podría sobrellevarlo. El caso es que he llevado un semestre loco entre presentaciones, clubs de lectura y colaboraciones con todos los que me lo piden. Y eso es parte de mi problema, que digo sí a todo, y hay que aprender a decir que no. Ni para...

He tardado casi dos semanas en aterrizar de la vorágine que se inició con la salida de «Las guerras de Elena» y que alcanzó su punto álgido con las presentaciones. Todo ha pasado muy rápido, demasiado, pero por fortuna han quedado reportajes grabados para poder saborearlo con calma y tomar conciencia de lo sucedido. Pero empezaré por el principio. No hace mucho, poco después de mi presentación, leía en el blog de mi compañera María José Moreno ―Lugar de encuentro― los nervios pasados pensando si llenaría o no el local en...

Tengo la sensación de que siempre empiezo las casas por el tejado, sobre todo en lo literario. Y también que el mundo digital discurre en paralelo con la edición tradicional sin apenas tocarse. Esta semana presento por fin mi novela Las guerras de Elena, pero tengo una sensación extraña porque no es nueva, no sale ahora, lo hizo en internet un 23 de abril como primicia digital para la feria de San Jordi de 2012 y, desde entonces, se está vendiendo en ebook y tengo opiniones de los lectores. Sin embargo,...

Ayer hicieron en TVE la película y el documental sobre la vida de Vicente Ferrer. Fue bonito de ver, esperanzador, y gratificante, y también me hizo reflexionar. Nunca imaginé la cantidad de trabas y el miedo que pueden provocar una generosidad sincera y brutal vertida, además, sobre gente muy necesitada. Sabía que la labor de Ferrer había sido ―y es, porque continúa después de su muerte―, meritoria y dura por las condiciones del país, pero también asumí que le habrían dado facilidades para tan hermoso proyecto. Vicente Ferrer se vio acosado...